Según estudios recientes, el 50% de los corredores tienen o han tenido dolor localizado en esta zona y de éstos, el 25% específicamente en la rótula. La rótula es una estructura ósea en la parte delantera de la rodilla donde se insertan las fibras del tendón del cuádriceps y el tendón rotuliano.
¿Por qué sufre tanto la rodilla del corredor?
Esta articulación es una de las que más carga sufre a la hora de correr y ello tiene una clara explicación. Con cada zancada el impacto contra el suelo genera una fuerza de reacción que se transmite hacia arriba afectando al esqueleto. La magnitud de esta fuerza es entre 1,5 y 3 veces el peso del cuerpo del corredor. Cierto es que la rodilla está diseñada para intervenir directamente en el movimiento y en el desplazamiento, pero una cosa es andar y la otra correr donde el impacto es mayor. Para que ésta sufra menos la carga adicional, existen una serie de músculos que se localizan en la zona del muslo (cuádriceps) y que si se trabajan de manera adecuada ayudan mucho a reducir y absorber la fuerza del impacto y en consecuencia a proteger a la articulación.
Referente al dolor, éste suele aparecer en la parte delantera de la rodilla, tanto en frío (por ejemplo, al bajar escaleras) o en caliente (cuando toca subir una cuesta dentro del recorrido del entrenamiento o de una carrera). En algunos casos, el dolor puede ser tan intenso que obliga a parar por imposibilidad de seguir dando zancadas.
La solución para esta lesión la podríamos estructurar en distintos niveles y evidentemente va a depender del grado y nivel en la que se encuentre, pero sea cual sea la razón, el descanso estará en el primer puesto de la lista de acciones a poner en práctica.
Causas de las molestias en las rodillas al correr
Lo primero que hay que valorar es el porqué de este dolor ya que se puede tratar de forma sintomática, pero buscar la razón es la manera más lógica para evitar que se reproduzca y evolucione.
Una de las causas es el ser pronador, es decir, cuando el pie gira hacia la parte interna con el consecuente intento de corrección por parte del fémur. Esta alteración se puede llegar a minimizar con un estudio por parte de un podólogo.
Salir a correr sin el calzado adecuado, el que debería estar adaptado al tipo de pisada, al peso del corredor, a la superficie por la que corre… aumenta la predisposición a este tipo de lesión.
También es importante conocer el tipo de entrenamiento y saber si se trabaja de manera adecuada los músculos para reducir la carga sobre la rodilla. Si no es así, recomendaciones específicas deberían estar dentro del planning de recuperación así como el de mantenimiento.
El médico será el que determinará el tratamiento farmacológico. En muchos casos, se combinan antiinflamatorios con condroprotectores que buscan regenerar el cartílago que suele estar dañado.
Cuidar al máximo las rodillas con toda la batería de posibilidades que están al alcance de la mano del runner será una forma de mantener alejado este problema.
Lo que debes saber…
- La rodilla es una de las articulaciones que más carga sufre a la hora de correr. Está diseñada para andar, y al correr el impacto es mucho mayor.
- La mitad de corredores sufre o ha sufrido alguna vez dolor localizado en esta zona, especialmente en la zona delantera.
- El descanso estará en el primer puesto de la lista de acciones a poner en práctica, cuando aparece el dolor.
Y recuerda que con tu Seguro de MAPFRE Salud cuentas con las mejores coberturas, como la atención médica personalizada las 24 horas del día.