Momentos de relax en la nieve: ventajas para la salud
Resumen del contenido
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Pasar un día en la nieve, ya sea esquiando o realizando una excursión por la montaña, puede resultar muy cansado. El organismo, tanto a nivel muscular como cardiovascular se resiente, y la piel sufre al estar expuesta al frío y al sol. Así pues, ¿a quién no le apetecen unos momentos de relax y recuperación después de un agotador día en la nieve?
La mayoría de hoteles en la montaña ofrecen la posibilidad de relajarse, recuperar fuerzas y poner el cuerpo de nuevo en condiciones para la próxima jornada de esquí, en un spa. Normalmente, este circuito de relajación consta de las siguientes zonas: piscinas termales, tumbonas o camas calientes, sauna o baño turco y zona de masajes o tratamientos de estética.
Las piscinas termales
La mayoría de centros de spa o termales ponen a nuestra disposición piscinas para relajarnos y dejar que la musculatura se recupere. Cuando se trata de piscinas termales, son las mismas propiedades del agua las que, además de los beneficios que pueden ofrecer los chorros y las burbujas, suman efectos positivos. Este tipo de agua tiene una concentración elevada de minerales que le confiere amplios beneficios, por ejemplo a nivel de las articulaciones con efecto antinflamatorio o a nivel de la piel como hidratante.
Los distintos tipos de chorros que se encuentran en estos espacios son otra manera de conseguir relajar la musculatura. Los hay para la zona de las cervicales y de la espalda, que suele ser una zona que recibe una carga importante a lo largo de la práctica del esquí. Las burbujas del jacuzzi también son una opción perfecta para conseguir rebajar la tensión acumulada en las piernas, sobre todo cuando se acaba el día.
Sea como fuere, zambullirse en agua caliente cuando uno está agotado permite relajarse y desconectar.
Las tumbonas o camas calientes
Las tumbonas o camas calientes acabarán de otorgar la relajación completa a toda la musculatura.
Sauna o baño turco
La sauna o el baño turco completará el circuito de relajación y, además, es útil para eliminar toxinas.
Plus de relajación
Hay quien quiere regalar a sus músculos, y al cuerpo en general, un poco más de cuidado y cariño. Este plus de relajación puede conseguirse mediante:
- Masajes: descontracturantes, para descargar los músculos que hayan podido cargarse durante el día, y relajantes con aceites esenciales para actuar también a nivel cutáneo.
- Tratamiento de estética para reparar la piel: no siempre pensamos que el frío y el sol son agentes que pueden agredir nuestra piel y que si no le ofrecemos los cuidados adecuados acabará pagando las consecuencias. Ponerse moreno es un objetivo bastante común entre los que suben a practicar esquí pero el sol no es el mejor aliado cutáneo. El hecho de que la nieve tenga un índice de refracción de la luz solar del 80% hace que debamos ser más conscientes de un buen cuidado y protección. En este sentido, dentro de los tratamientos de estética, los faciales suelen ser los tratamientos estrella para los esquiadores, ya que utilizan productos enfocados a la reparación y a la hidratación que nutrirán y protegerán la piel durante los días en la nieve.
Lo que debes saber…
- Completar un día en la nieve con un espacio dedicado al relax le permitirá un momento de relajación y recuperación al cuerpo.
- El agua de las piscinas termales tiene una alta concentración de minerales que le confiere beneficios: a nivel de las articulaciones tiene efecto antinflamatorio y a nivel de la piel, hidratante.
- Los tratamientos faciales ayudarán a proteger y cuidar la piel de los esquiadores, sometida al frío y al sol de montaña.
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