Es la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) la que, en 1950, establece que cada 7 de abril se celebre el “Día Mundial de la Salud”. A lo largo de estos 78 años se le han dado protagonismo a multitud de temáticas desde salud mental, salud infantil o salud bucodental. Se han tratado siempre temas transversales de gran interés mundial y que afectan en mayor o menor medida a toda la población. Para este año, la temática escogida es “Construir un mundo más justo y saludable” buscando dar visibilidad a situaciones extremas, en países en los que la cobertura sanitaria no es universal. Conseguir atención inmediata en situaciones complicadas puede salvar vidas y este es el objetivo de la campaña de este año.
Retomando el concepto de salud, como bien indica su definición, salud incluye diferentes esferas en las que el bienestar es el pilar. La esfera de lo físico, de lo mental y de lo social tiene la misma importancia y es necesario que haya un equilibrio entre todas, para que la persona se considere saludable. Cada una de ellas abarca amplias consideraciones siendo entidades con “nombre propio”.
Salud mental
La salud mental se define como “un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad”, por lo que es evidente que es una parte indivisible del bienestar y la salud personal. Es por ello que en muchas ocasiones se ha dedicado el “Día Mundial de la Salud” a alguna de las patologías que afectan más frecuentemente a la población. De hecho, tiene tanta importancia, que la salud mental tiene su propio día en el calendario, concretamente el 10 de octubre.
Son muchas las patologías a las que se ha querido dar visibilidad, siendo una de ellas la depresión que tuvo su protagonismo en el 2017. Según datos de la OMS, más de 300 millones de personas en el mundo sufren depresión, la principal causa de discapacidad, y más de 260 millones tienen trastornos de ansiedad. Sufrir problemas mentales puede limitar claramente la vida de alguien en su día a día y por tanto acabar afectando a su salud general.
La mayoría de las iniciativas de la OMS involucran a la comunidad, buscando crear conciencia y acciones que impliquen cambios de futuro. En la última campaña de salud mental del 2017 se utilizaron datos concretos relacionados con la inversión económica y los resultados que se pueden obtener cuando los recursos tienen un uso adecuado. La inversión en el tratamiento de la depresión y la ansiedad tiene un rendimiento del 400% y aun teniendo estos datos la realidad es que se invierte poco y cuesta mucho.
Salud física
Además de la salud mental, en la definición se habla del bienestar físico. Parece obvio relacionar la buena salud de la persona con la buena salud física, pero como hemos mencionado con anterioridad existen otros factores de bienestar necesarios para conseguir una salud plena:
- Poder moverse con libertad
- No sufrir dolores
- No tener que medicarse
Para llegar a la madurez en condiciones, tener unos buenos hábitos es esencial. Todos vamos a envejecer irremediablemente. El grupo de personas mayores de 65 años pasará de 605 millones a 2000 millones en el transcurso de medio siglo. Los años van a pasar para cada uno de nosotros, y está en nuestras manos envejecer de manera saludable.
Establecer hábitos saludables como una correcta alimentación o la práctica de actividad física, son decisiones individuales y pequeñas pero que contribuyen en gran manera a la evolución personal. Tanto es así que tras el éxito del Día mundial de la salud del 2002 bajo el lema “Por tu salud, muévete”, se decidió que el día 6 de abril se celebraría el Día Mundial de la Actividad Física. No fue en vano que se tomó dicha decisión ya que la inactividad física es uno de los principales factores de riesgo de mortalidad a nivel mundial y es uno de los principales factores de riesgo de padecer enfermedades no transmisibles (ENT), como las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y la diabetes.
Marcar en el calendario el 7 de abril como fecha a considerar ya que ello permite ampliar conocimientos sobre temas de interés general sobre la salud de carácter mundial, pero sobre los que podemos actuar de manera individual.
Lo que debes saber…
- La esfera de lo físico, de lo mental y de lo social tiene la misma importancia y es necesario que haya un equilibrio entre todas, para que la persona se considere saludable.
- Poder moverse con libertad, no sufrir dolores o no tener que medicarse son algunas de las características que pueden definir a “una persona sana” y para conseguirlo una buena opción es establecer buenos hábitos.
- Una correcta alimentación o la práctica de actividad física son decisiones individuales y pequeñas pero que contribuyen en gran manera a la evolución personal.
- Muy importante es realizarse un reconocimiento médico periódicamente, para valorar el estado de salud y poder prevenir cualquier patología. Con los profesionales del cuadro médico de los seguros de MAPFRE Salud estás en las mejores manos.