Resumen del contenido
En la actualidad, aproximadamente el 5% de las denuncias por robo corresponden a personas que sufren cleptomanía. De hecho, cuando el problema se vuelve crónico, los cleptómanos suelen tener problemas penales.
¿Qué es la cleptomanía?
La cleptomanía es un trastorno del control de impulsos que se caracteriza por la tendencia a robar sin ningún motivo ni necesidad. Básicamente, el cleptómano siente un impulso incontrolable de robar objetos, generalmente de escaso valor. El malestar emocional que experimenta lo calma hurtando, y después se siente culpable y avergonzado por ello. Esto provoca un círculo vicioso que se repite continuamente y del cual es muy difícil salir sin ayuda.
Tipos de cleptomanía
- Esporádica: sufren episodios cortos y esporádicos, con largas etapas sin actividad.
- Episódica: sufren períodos prolongados e intensos de robos, con momentos de remisión.
- Crónico: roban de forma constante e incesante, y suelen tener problemas con la justicia.
¿Cómo es la personalidad de un cleptómano?
- Son impulsivos: no roban como un beneficio personal ni recurren a este acto para su supervivencia.
- Devuelven los artículos robados y, la mayor parte de las veces, sin que nadie se entere, por la vergüenza que sienten por ello.
- No planean sus robos, sino que el acto de hurtar es una necesidad involuntaria.
- No tienen problemas económicos: todo lo que roban pueden comprarlo sin problema con su propio dinero.
- Roban en lugares públicos, como tiendas o supermercados, corriendo el riesgo de que otros puedan verlo cometiendo el acto delictivo. También es cierto que muchos llegan a robar en casas de amigos o conocidos.
Síntomas, ¿cómo se diagnostica?
A diferencia de otros trastornos del control de los impulsos, los síntomas de la cleptomanía suelen ser difíciles de identificar debido a que en la mayoría de los casos se ocultan por vergüenza o temor a ser juzgados. Lo que provoca que el diagnóstico aparece cuando los robos llegan a instancias legales. Sin embargo, si te identificas con algunas de estas situaciones, es probable que sufras este trastorno:
- Sientes un fuerte impulso por robar cosas innecesarias.
- Experimentas tensión, ansiedad o excitación antes del robo.
- Notas sensación de alivio o placer durante el robo.
- Te sientes culpable, con remordimiento y vergüenza después del robo.
- Tienes temor a ser arrestado tras el robo.
- El impulso de robar vuelve a reaparecer y se repite el ciclo de cleptomanía.
Causas, ¿qué origina esta adicción a robar?
Aunque sus causas no están claras, existen diversas teorías:
- Algunas investigaciones apuntan hacia la existencia de un componente hereditario relacionado con la dificultad en el control de los impulsos.
- También se dice que la cleptomanía podría estar relacionada con alteraciones de la serotonina, una sustancia química del cerebro, y que la emoción que provoca el robo ayuda a reducir los síntomas depresivos que sufre el cleptómano.
- Otras investigaciones apuntan a que este trastorno puede aparecer tras sufrir un golpe en la cabeza.
- En muchos casos, se asocia a trastornos de adicciones, pues el robo aumenta la liberación de dopamina, un neurotransmisor que produce placer.
- Otro posible detonante son las alteraciones en el sistema opioide del cerebro, encargado de regular los impulsos.
- Si se tiene otra enfermedad mental como un trastorno bipolar o ansiedad.
Tratamiento, ¿qué puedo hacer para superar mi adicción a robar?
La cleptomanía es muy difícil de superar sin un tratamiento y ayuda profesional. De lo contrario, la conducta puede prolongarse y, con tendencia, empeorar. Lo habitual es que se lleve a cabo un abordaje mixto de psicoterapia y psicofármacos, incluyendo a veces los grupos de ayuda.
Medicamentos
Los medicamentos utilizados para la cleptomanía deben de ser recetados por un psiquiatra y no curan el trastorno. Se utilizan para disminuir los síntomas relacionados con la depresión, el abuso de sustancias y la impulsividad.
Psicoterapia
No existe un tratamiento psicológico ideal para la cleptomanía, ya que la elección del tratamiento adecuado dependerá de las circunstancias y necesidades específicas de cada paciente. Factores como el estilo de vida, la presencia de otros trastornos como la depresión, entre otros, influirán en la elección del enfoque terapéutico. No obstante, es necesario saber que en el proceso de curación son común las recaídas.
Complicaciones, ¿qué puede pasar si no lo trato?
La falta de tratamiento puede conducir a problemas emocionales, familiares, laborales y legales. Por otro lado, debido a la vergüenza y culpa, la autoestima se deteriora y es fácil caer en crisis de depresión. Otras complicaciones y trastornos relacionados son:
- Ludopatía o compras compulsivas.
- Consumo de drogas y alcohol.
- Trastornos alimentarios.
- Depresión y ansiedad.
- Trastorno bipolar.
- Pensamiento suicida o intentos de suicidio.
En conclusión, la cleptomanía es un trastorno que se ve poco en las consultas, debido al sentimiento de vergüenza que produce, pero es importante saber que puede tratarse y que podemos mejorar la calidad de vida de las personas afectadas por este trastorno.
Lo que debes saber…
- El malestar emocional que experimenta el cleptómano lo calma hurtando, y después se siente culpable y avergonzado por ello. Esto provoca un círculo vicioso que se repite continuamente y del cual es muy difícil salir sin ayuda.
- Entre las causas, algunas investigaciones apuntan hacia la existencia de un componente hereditario relacionado con la dificultad en el control de los impulsos, mientras que otras la relacionarían con alteraciones de la serotonina.
- La cleptomanía es muy difícil de superar sin un tratamiento y ayuda profesional. De lo contrario, la conducta puede prolongarse y, con tendencia, empeorar. Lo habitual es que se lleve a cabo un abordaje mixto de psicoterapia y psicofármacos,