Resumen del contenido
LO QUE DEBES SABER…
- Puede estar relacionada con la pareja (se pierde el deseo sexual con la pareja pero se siente deseo con otras personas) o bien puede ser una disminución del deseo sexual en general.
- La persona que sufre la disfunción puede no expresar la situación y seguir manteniendo relaciones sexuales con apatía o puede incluso sentir dolor durante las relaciones.
- Tiende a afectar a las mujeres, especialmente durante la menopausia debido a la disminución hormonal fisiológica que se produce.
¿Causas del trastorno del deseo sexual hipoactivo?
La disminución del deseo sexual puede estar relacionada con la pareja (se pierde el deseo sexual con la pareja pero en cambio sí que se siente deseo con otras personas) o bien puede ser una disminución del deseo sexual en general y no mostrarse interesado sexualmente por nadie.
Puede tratarse de un trastorno primario (la persona nunca ha sentido demasiado interés o deseo sexual) o secundario (la persona solía tener deseo sexual pero ha disminuido o ha desaparecido).
¿Cómo se produce el deseo sexual hipoactivo?
El deseo sexual es un proceso complejo en el que intervienen distintos tipos de actividades: cerebral, hormonal y cognitiva. Este entramado produce factores estimulantes e inhibitorios que, cuando se desequilibran, producen el deseo sexual hipoactivo.
Sin embargo, los problemas de comunicación en la pareja, el estrés en el trabajo, los estados depresivos o el bajo nivel de autoestima también pueden producirlo, así como ciertas medicaciones, como los antidepresivos, pueden tener como efecto secundario la disminución del deseo sexual.
Además, es un trastorno muy frecuente en la menopausia debido a la disminución hormonal fisiológica que se produce. De hecho, a pesar de que es difícil saber la incidencia exacta de este trastorno ya que muchas personas que lo padecen no lo consultan con un médico y otras descubren que lo padecen al ser interrogadas por este tema en otra consulta, este trastorno tiende a afectar a mujeres.
Síntomas de la disminución del deseo
El principal síntoma es un marcado desinterés por la actividad sexual. Puede ser que la persona afectada no exprese la situación a su pareja y siga manteniendo relaciones sexuales con apatía. En otros casos la disfunción aparecerá en forma de dolor durante las relaciones (dispareunia) o bien como anorgasmia.
Tratamiento
La escasa conciencia de que la disminución del deseo sexual es un problema médico ha retrasado la investigación de fármacos diseñados específicamente para este trastorno.
El papel endocrinológico es importante en esta disfunción por lo que se ha investigado en el tratamiento hormonal. El tratamiento hormonal sustitutivo en las mujeres menopáusicas está demostrado que mejora la atrofia vaginal que pueden producir las relaciones sexuales dolorosas, una de las causas frecuentes de la disminución del deseo sexual en la menopausia. No obstante, este tratamiento no mejora claramente el deseo sexual en las mujeres que no presentan dispareunia.
Además, se han realizado estudios en mujeres con una menopausia quirúrgica (en las que se les han extirpado los ovarios cuando todavía no habían llegado a la menopausia) con suplementos de testosterona pero todavía suscitan un amplio debate entre los expertos. También la tibolona, uno de los fármacos utilizados para el tratamiento de los síntomas de la menopausia, ha demostrado mejorar el deseo sexual hipoactivo de la menopausia.
Finalmente, los tratamientos más naturales, derivados de las plantas son una alternativa muy popular. El extracto de ginko biloba, el tribulus terrestris y la maca andina son algunos de los preparados más utilizados, aunque no hayan estudios científicos que demuestren su efectividad.