Si a menudo te dicen que te lo tomas todo muy “a pecho”, te angustias con facilidad mientras los demás no se inmutan o te consideras una persona muy observadora, quizá seas una “persona altamente sensible” (PAS).

Hace dos décadas la psicóloga y científica Elaine Aron acuñó el término para definir a las personas que tienen una sensibilidad por encima de lo normal. Se estima que entre un 15 y un 20% de la población son PAS.

Signos de que eres una persona muy sensible

Hay 4 los pilares básicos que debe tener la persona para poder considerarse PAS. Estos pilares responden a las siglas en inglés “DOES” (Deep processing, Overstimulation, strong Emotions y Sensitive to subtleties):

  • Procesamiento intenso y profundo de toda la información. Reflexiona e intenta comprender todo al máximo.
  • Sobreestimulación y saturación al procesar la gran cantidad de información sensorial y emocional que es capaz de percibir. Según Aron, una PAS tiene un sistema neuro-sensorial más fino de lo habitual, por lo que registra más información que quien no es PAS, lo que daría lugar al bloqueo.
  • Alta emocionalidad ante diversas situaciones y sensaciones. Las PAS experimentan y exteriorizan la alegría, tristeza, injusticia con mucha intensidad. También son personas muy empáticas.
  • Elevada sensibilidad en los cinco sentidos (vista, oído, tacto, olfato y gusto), así como para captar pequeñas sutilizas a su alrededor o en el estado emocional de las personas.

¿Es algo malo o algo bueno?

Según cómo la persona perciba y entienda esta capacidad sensitiva, puede tener implicaciones diferentes.

Puede ser vista como una condena si los posibles inconvenientes se ubican en una posición muy significativa:

  • Baja tolerancia a los ruidos, olores o luces, generando una alta negatividad en la persona.
  • Umbral de dolor más bajo, por lo que sienten más dolor que alguien que no es PAS. Cabe señalar que este umbral puede modificarse con un abordaje biopsicosocial del dolor.
  • Son muy susceptibles a las críticas.
  • Tardan más en tomar decisiones, ya que piensan mucho y tienen encuentra todas las opciones.
  • Dificultad para poner límites a las personas o decir “no”.
  • Se adaptan mal a los cambios.
  • Al ser personas más sensibles, también son más vulnerables a los problemas en general, por lo que se pueden desarrollar más fácilmente trastornos de tipo depresivo o ansioso.

Por otro lado, el hecho de ser hipersensible puede ser un don para la persona:

  • Son personas dispuestas a ayudar a los demás y mejorar el mundo. Alta capacidad de empatía. Suelen estar involucrados en temas como el medio ambiente, los animales, la justicia…
  • Son grandes pensadores y se involucran profundamente en sus proyectos. Gran capacidad analítica y de concentración.
  • Saben apreciar el arte y la belleza.
  • Son buenos trabajando en equipo.
  • Capacidad para disfrutar las pequeñas cosas.
  • Suelen ser personas intuitivas.
  • Transmiten sentimientos fácilmente.
  • Se sienten bien en soledad.
  • Amor por el trabajo bien hecho.

Visto todo esto, la alta sensibilidad es una capacidad que habría que considerar como neutra, ya que ninguna de las características anteriores es buena o mala de por sí, forman parte de un continuo.

Por ejemplo, el amor por el trabajo bien hecho puede ser una virtud, pero es un inconveniente cuando se lleva al extremo, convirtiéndose en perfeccionismo.

Ser una persona sensible no significa ser débil

Todas las personas tienen potencialidades y vulnerabilidades, se trata de autorregularse de la forma más eficiente.

 Las personas altamente sensibles no son seres especiales con superpoderes, el hecho de que una persona tenga más agudeza a nivel sensorial y emocional no hace que sean personas fuera de lo común. Todos tenemos destrezas, aptitudes o habilidades en diferentes áreas.

 Tampoco son personas introvertidas, no necesariamente (se calcula que alrededor de un 30% de las PAS son extrovertidas). Ni hay más mujeres altamente sensibles que hombres.  Sin embargo, por convencionalismos sociales, algunos hombres inhiben algunos comportamientos sensibles para no ser criticados.

Entenderte a ti mismo para saber manejarlo

Lo primero es no dejar que la etiqueta de persona altamente sensible te condiciones. Si bien las clasificaciones pueden ayudar a entender mejor algunos aspectos de uno mismo y de la realidad.

Tampoco te escudes en ser PAS para no cambiar lo que no te gusta de ti. Por ejemplo, si te afectan las críticas ajenas en exceso, no te digas “no puedo evitarlo, soy sensible”, ve más allá e intenta resolver esta dificultad.

Los umbrales sensoriales, es decir, lo agudizados que estén tus sentidos no son estáticos. Pueden variar en diferentes momentos vitales y también pueden estar influidos por otros elementos. Es un hecho constatado que la percepción del dolor no sólo proviene de factores fisiológicos sino también de factores psicológicos y sociales, por lo tanto, se puede modular.

Si la alta sensibilidad interfiere en tu bienestar e impide el buen ajuste a tu día a día, busca ayuda psicológica especializada.

Lo que debes saber…

  • La sensibilidad es un rasgo de la personalidad que hace referencia a una mayor perceptibilidad sensorial y emocional. Según cómo la persona perciba y entienda esta capacidad sensitiva, puede tener implicaciones diferentes.
  • El objetivo sería reconocer y explotar las potencialidades y aprender a transformar los inconvenientes en aliados.
  • En el caso de que la alta sensibilidad interfiera en el propio bienestar e impida el buen ajuste a las actividades del día a día, busca ayuda psicológica especializada.