Bocio: qué es, síntomas y tratamiento
Resumen del contenido
Blog Salud MAPFRE es un blog referente en el mundo de la medicina gracias a que todos sus contenidos están escritos por médicos especializados.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus cuestiones sobre la salud del cuerpo y la mente.
Tipos de bocio
En función de las características morfológicas y la función del bocio, este se puede clasificar en varios tipos:
- Difuso: aumento de la glándula a expensas de un aumento global y regular.
- Nodular: aumento focal del tamaño tiroideo dando lugar al desarrollo de nódulos.
En función de si produce más o menos hormonas tiroideas de las necesarias para el correcto funcionamiento de los órganos y sistemas del cuerpo, el bocio puede ser:
- Normofuncionante: el bocio tiene una producción normal de hormonas.
- Hiperfuncionante: tiene una producción aumentada de hormonas.
- Hipofuncionante: tiene una producción disminuida de hormonas.
Síntomas
Los síntomas varían en función del tamaño del bocio y de si este es hiperfuncionante, normofuncionante o hipofuncionante. No obstante, a veces lo único que se manifiesta es la aparición de un bulto en la región anterior del cuello, sin que la persona que lo padece tenga ningún otro síntoma.
Si el bocio es muy grande causa compresión de estructuras vecinas como la tráquea, el esófago o el nervio recurrente, lo que producirá dificultad respiratoria, dificultad para la deglución y alteración en la voz.
Además, el paciente presentará los síntomas de hipertiroidismo o de hipotiroidismo, en función del grado de funcionamiento del bocio.
Diagnóstico
El mejor método es la realización de una ecografía cervical, que nos permitirá conocer la morfología del bocio, y además nos permitirá realizar una posible punción del mismo para descartar malignidad.
La determinación en un análisis sanguíneo de las hormonas del tiroides nos permite conocer si el bocio produce una hiperfunción o hipofunción de la glándula.
Tratamiento
El tratamiento del bocio es diferente en los distintos pacientes dependiendo de su etiología.
Los bocios difusos y pequeños, o con pocos nódulos, y que son normofuncionantes no son necesarios tratarlos; tan sólo requieren una vigilancia periódica.
Las dosis pequeñas de yodo pueden ayudar cuando el bocio se debe a una deficiencia de éste.
Cuando el bocio produce hipotiroidismo, se debe administrar tiroxina. Y si causa hipertiroidismo, ha de tratarse con medicamentos antitiroideos, o yodo radiactivo o cirugía, según cada uno de los casos.
En los casos de un bocio grande que no responde al manejo médico, o que produce compresión de la vía respiratoria o digestiva, se indicará la extirpación parcial de la glándula tiroidea.
Medidas preventivas
La mejor medida preventiva es el uso de sal de mesa con yodo.
¿Conoces los beneficios del Seguro de Salud MAPFRE? Haz clic en el enlace y descubre todas las coberturas.
Comentarios (0)