¿Cuándo ir a urgencias por regla abundante?
Resumen del contenido
Médico especializada en ginecología y obstetricia. Con más de dos décadas de experiencia en la profesión, es una experta en ecografía de 20 semanas, diagnóstico prenatal, parto, histeroscopia quirúrgica y laparoscopia, entre otras. Compagina su trabajo en diferentes centros con la docencia y la redacción de artículos.
La cantidad de volumen de fluido menstrual varía mucho de unas mujeres a otras en función de diferentes aspectos fisiológicos y patológicos. Para valorar lo que son reglas abundantes y cuando nos tenemos que preocupar deberemos antes definir cuáles son los valores considerados como pérdida normal.
¿Qué se considera pérdida normal?
En una regla normal se produce una pérdida de fluido media de entre 30 y 50 ml, que corresponde a la capacidad de unas tres cucharadas soperas. La cantidad es difícil de valorar según el medio que se use para contener el sangrado. Para hacernos una idea, las copas menstruales tienen una capacidad aproximada de unos 15 ml las de talla más pequeña hasta 30 las de talla más grande. Un tampón completamente empapado contiene 5-10 ml en función de la medida de la que hablemos (estándar o maxi, como las compresas).
La regla se considera normal por debajo de 60 ml, moderada entre 60-100 ml y excesiva cuando es superior a 100 ml.
Es difícil saber qué porcentaje de mujeres en edad menstrual presentan reglas abundantes, porque suele estar infradiagnosticado. De hecho, las propias mujeres asumen su sangrado como normal porque es difícil comparar, pero probablemente una cuarta parte sufran sangrados menstruales excesivos, lo cual puede causar anemia, cansancio y afectar a la calidad de vida.
¿Qué causa las reglas abundantes?
Antes de seguir definiremos a qué corresponde el sangrado menstrual: durante el ciclo hormonal de la mujer se construye un tejido en el interior del útero, llamado endometrio, que tiene como finalidad nutrir un supuesto embarazo durante los primeros días y semanas hasta que se consolida la placenta. Se trata de un tejido muy delicado que, si transcurre el ciclo sin embarazo, se desprende dejando las paredes de la cavidad uterina desnudas como una herida abierta, que sangran durante unos días hasta que crece un nuevo tejido y las cicatriza. Por lo cual el sangrado menstrual corresponde en parte a este tejido endometrial que es una mucosa suave y gelatinosa mezclada con la sangre de las paredes uterinas.
Hay diferentes patologías que pueden ocasionar reglas abundantes, pero también hay mujeres que presentan pérdidas regulares importantes sin una causa patológica y corresponde a su propia constitución. Estas son algunas de las causas:
- Cuando existe una causa para esta condición puede tratarse de un trastorno funcional, por ejemplo, en la perimenarquía o perimenopausia, en que por inmadurez o desajustes hormonales el tejido endometrial está mal construido o es más grueso de la cuenta.
- Otras causas pueden corresponder a miomas uterinos, que son nódulos fibrosos benignos que deforman la pared uterina haciendo un útero más voluminoso con las fibras musculares desordenadas lo que contribuye a que sangre más, o pólipos endometriales que son otro tipo de patología muy común y benigna en la que se produce el crecimiento de un tejido organizado en el interior de la cavidad que también sangra durante las reglas aumentando el sangrado menstrual o entre reglas.
- Puede haber otras causas menos frecuentes, pero, en cualquier caso, ante un sangrado menstrual abundante se recomienda consultar con el ginecólogo para hacer un diagnóstico, y en función de éste establecer un tratamiento, pues hay muchas opciones efectivas para mejorar esta disfunción.
¿Cuándo alarmarse y acudir a urgencias?
Aunque existe cierta variabilidad en la cantidad de fluido menstrual de un ciclo a otro, no suele ser frecuente que una mujer que habitualmente tiene reglas normales sufra repentinamente un sangrado menstrual mucho más abundante de lo habitual. En un caso así habría que descartar que se haya tratado de un aborto o algo traumático, que sí podría ser un sangrado abrupto que pueda requerir una intervención urgente.
Si el sangrado es mucho más abundante de lo habitual hay un momento en que nos preguntamos: ¿cuándo es el momento de acudir a urgencias? Pues es difícil de definir. Raramente un sangrado menstrual agudo puede ser tan importante como para poner a la mujer en una situación crítica. Lo primero que deberemos hacer es disminuir la actividad física, ya que el reposo contribuirá a no empeorar el sangrado. También beberemos abundante líquido para reponer la pérdida de volumen y valoraremos la opción de tomar alguna bebida para deportistas con el objetivo de reponer los minerales perdidos.
Hemos de tener en cuenta la cantidad perdida aproximada: 10 ml si empapamos completamente una compresa o un tampón que, en momentos de máximo flujo excepcionalmente una mujer puede necesitar cambiar cada una o dos horas durante unas horas. Eso nos coloca en una pérdida de 100 ml en día, excepcionalmente, que es muchísimo, pero lejos de, por ejemplo, los 400 ml que se extraen en una donación de sangre rutinaria sin consecuencias.
En conclusión, el sangrado menstrual abundante es una condición que debe consultarse con el ginecólogo en la consulta rutinaria o preferente, y habitualmente no debería ser un motivo de consulta a urgencias, pero ante un sangrado abundante y que no cede, aplicaremos el sentido común y puede haber situaciones en que una visita a urgencias sea necesaria.
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