Resumen del contenido
Aquí aportamos información sobre la recuperación después del COVID, incluidos los síntomas continuados que tienen algunas personas.
¿Cuándo mejoraré después de tener COVID?
Para la mayoría de las personas que contraen la COVID, los síntomas mejoran en unas pocas semanas. Pero algunos, especialmente quienes enfermaron lo suficiente como para necesitar ir al hospital, continúan teniendo síntomas por más tiempo, y estos pueden ser leves o graves.
Generalmente se describen tres etapas de enfermedad y recuperación:
- COVID agudo: se refiere a los síntomas que duran hasta cuatro semanas después de que una persona se infecta. La mayoría de las personas con COVID leve no presentan síntomas más allá de esta etapa, pero algunas sí.
- COVID sintomático continuo: se refiere a los síntomas que continúan de 4 a 12 semanas después de la infección. Las personas que se enferman gravemente durante la etapa aguda tienen más probabilidades de presentar síntomas continuos.
- Post COVID: se refiere a los síntomas que continúan más allá de las 12 semanas posteriores a la infección. Esto es más común en personas que padecieron un covid grave, lo que significa que necesitaban permanecer en la unidad de cuidados intensivos (UCI), que se les pusiera un ventilador (máquina de respiración) o que tuvieran otros tipos de soporte respiratorio.
¿Qué síntomas son más probables que persistan?
Esto no es igual para todos. Pero los síntomas que tienen más probabilidades de durar más de unas pocas semanas incluyen:
- Fatiga, es decir sentirse muy cansado.
- Sensación de dificultad para respirar.
- Malestar en el pecho.
- Tos
Otros síntomas físicos también pueden continuar más allá de unas pocas semanas. Estos incluyen problemas con el sentido del olfato o el gusto, dolor de cabeza, secreción nasal, dolor articular o muscular, dificultad para dormir o comer, sudoración y diarrea.
Existen algunos casos de personas que presentan persistencia de síntomas psicológicos continuos. Estos incluyen:
- Dificultad para pensar con claridad, concentrarse o recordar.
- Depresión, ansiedad o una afección relacionada denominada trastorno de estrés postraumático («TEPT»).
Es difícil para los médicos predecir cuándo mejorarán los síntomas, ya que esto puede variar de persona a persona. Su recuperación dependerá de la edad, estado general de salud y la gravedad de sus síntomas del COVID. Algunos síntomas, como la fatiga, pueden continuar incluso mientras otros mejoran o desaparecen.
¿Cuánto tiempo seré contagioso?
Es difícil saberlo con certeza. En general, la mayoría de las personas ya no son contagiosas entre 10 y 14 días después de que comenzaran los síntomas. Pero esto depende de varias cosas, incluida la gravedad de la infección y qué síntomas continúan teniendo.
¿Cuándo debo llamar a mi médico o enfermera?
Un poco de fatiga es común y puede persistir durante algunas semanas hasta que se recupere. Pero si tuvimos COVID y continuamos teniendo síntomas molestos (como fatiga severa o malestar en el pecho o falta de aire) después de dos a tres semanas, debemos pedir consulta con su médico o enfermera. También hemos de consultar en caso de empezar a sentirnos peor o si presentamos algún síntoma nuevo. Dependiendo de los síntomas, es posible que necesitemos pruebas.
¿Cómo se tratan los síntomas persistentes?
En general, el tratamiento implica abordar cualquier síntoma que se tenga, es un tratamiento sintomático. A menudo, esto significa combinar algunos tratamientos diferentes.
Si estás cansado, intenta descansar lo suficiente. También puedes probar estas estrategias para aliviar la fatiga:
- Planificar la realización de tareas importantes para cuando tengas la mayor cantidad de energía, generalmente por la mañana.
- Controlar el ritmo de actividades para no hacer demasiado a la vez y hacer descansos a lo largo del día si nos sentimos cansados.
- Pensar en las tareas y actividades más importantes de cada día, de modo que no utilicemos más energía de la que necesitamos.
- Si no duermes bien, mejorar tu «higiene del sueño» puede ayudar. Esto implica cosas como irse a la cama y levantarse a la misma hora todos los días, evitar la cafeína y el alcohol al final del día y no mirar las pantallas antes de acostarse.
Dependiendo de la situación, es posible que también necesites:
- Medicamentos para aliviar síntomas como tos o el dolor.
- Rehabilitación cardíaca: esto implica mejorar la salud cardiaca a través de actividades como ejercicio, cambios en la dieta y dejar de fumar (si fumamos).
- Rehabilitación pulmonar: incluye ejercicios de respiración para ayudar a fortalecer los pulmones.
- Terapia física y ocupacional: se trata de ejercicios de aprendizaje, movimientos y formas de realizar las tareas cotidianas.
- Tratamientos para la ansiedad o la depresión: esto puede incluir medicamentos y/o psicoterapia.
- Ejercicios y estrategias para ayudar con la memoria y la concentración.
¿Hay alguna forma de evitar los síntomas persistentes?
La única forma de evitar esto con seguridad es evitar contraer COVID. Es cierto que la mayoría de las personas infectadas no presentaran una covid grave. Pero es imposible saber quién se recuperará rápidamente y quién tendrá síntomas persistentes.
La mejor forma de prevenir la COVID es vacunándose. Además de protegerse, vacunarse también ayudará a proteger a otras personas, incluidas aquellas que tienen un mayor riesgo de enfermarse gravemente o morir. Las personas que no están vacunadas pueden reducir su riesgo mediante el distanciamiento social, el uso de mascarillas en público y lavándose las manos con frecuencia.
Lo que debes saber…
- Para la mayoría de las personas que contraen la COVID, los síntomas mejoran en unas pocas semanas. Pero algunos, especialmente quienes se enfermaron lo suficiente como para necesitar ir al hospital, continúan teniendo síntomas por más tiempo, y estos pueden ser leves o graves.
- Es difícil para los médicos predecir cuándo mejorarán los síntomas, ya que esto puede variar de persona a persona. Su recuperación dependerá de la edad, estado general de salud y la gravedad de sus síntomas de la COVID.
- En general, el tratamiento implica abordar cualquier síntoma que se tenga, es un tratamiento sintomático. A menudo, esto significa combinar algunos tratamientos diferentes.