Resumen del contenido
La afasia es un tipo de lesión que aparece en personas que previamente estaban bien y que empiezan a mostrar problemas para comunicarse. La afasia puede afectar a diferentes esferas: la lectura, la escritura, la expresión o la comprensión. Como curiosidad, el trastorno en la adquisición del lenguaje inicial recibe el nombre de disfasia, en este caso se detecta en la infancia dado que el niño es incapaz de comprender y/o expresarse desde el inicio.
Causas de la afasia
Existen diferentes causas de afasia siendo las más frecuentes un accidente cerebrovascular, un traumatismo craneoencefálico, una infección cerebral, un tumor o un proceso degenerativo neurológico. En función del área donde se ubique la zona lesionada dará lugar a unos u otros síntomas pudiendo aparecer un trastorno sensorial, un trastorno motor o ambos.
Tipos de afasia y características
Analizaremos los tipos de afasia según sus características, siendo dos tipos concretos de afasia, bronca y Wernicke las que merecen especial atención desde el punto de vista clínico:
Afasia de Broca (motora)
Se caracteriza por una expresión verbal muy afectada y una comprensión aceptable, aunque también afectada. Estos pacientes tienen imposibilidad de producción verbal fluida y suelen emplear frases cortas con gran esfuerzo. También suelen estar alteradas la denominación (búsqueda del nombre de las cosas), la lectura y la escritura. La lesión radica a nivel frontal izquierdo, donde se ubica la llamada área de Broca. La mayoría de los pacientes que la presentan tienen un déficit motor, más o menos grave, del hemicuerpo derecho.
El paciente es consciente de las limitaciones en su expresión verbal por lo que habla poco y emplea una gramática simple (tipo telegráfico), sin frases elaboradas. Sin embargo, su comprensión del lenguaje es casi normal.
Afasia de Wernicke (sensorial)
Se trata de un trastorno de la comprensión. La producción lingüística es fluida y abundante pero incoherente. El lenguaje carece de significado por el empleo de parafasias fonémicas (reemplazan una palabra por otra fonéticamente similar pero conceptualmente diferente). Por ejemplo, en lugar de decir tapiz dicen lápiz por lo que cambia absolutamente el concepto de la frase haciéndose difícil su comprensión. No son conscientes de sus errores gramaticales.
Se produce por lesión de áreas temporo-parietales donde está ubicada el área de Wernicke. Estos pacientes no presentan déficit motor dado que su lesión no afecta al área cerebral que controla el movimiento.
Afasia anómica
Tiene dificultad para encontrar el término correcto de las cosas. Es el trastorno afásico más común. Es frecuente que los pacientes que la sufren empleen los llamados circunloquios (expresiones compuestas por muchas palabras para expresar algo que hubiera podido decirse con una sola o muy pocas palabras) con la finalidad de suplir el nombre que no consiguen hallar.
Afasia global
El paciente no puede hablar, entender, leer ni escribir. Este término se emplea cuando están gravemente afectadas las funciones expresivas y receptivas del lenguaje. Los pacientes que la sufren tienden a la depresión por su imposibilidad comunicativa y su afectación motora añadida (hemiplejía derecha). La lesión cerebral que padecen es extensa.
Afasia de conducción
El lenguaje espontáneo es fluido con la comprensión relativamente preservada. Tienen problemas para la discriminación fonémica, la comprensión de frases y, sobre todo, gran dificultad para la repetición. La lesión radica a nivel temporal.
¿Cómo afecta al paciente?
El área más frecuentemente afectada es la de la expresión del lenguaje y, a su vez, puede manifestarse de diversas formas. Es frecuente detectar parafasias o errores en el empleo de fonemas (por ejemplo, decir pera en lugar de para), palabras (por ejemplo, decir sábana en lugar de mantel o trapo en vez de toalla) y anomia (dificultad para encontrar los términos más adecuados para nombrar los objetos). En la progresión natural se detecta una dificultad progresiva en la comprensión del significado de las frases complejas. Comprenden, sin embargo, palabras. Otro síntoma característico es el agramatismo, que se manifiesta con la omisión o el uso incorrecto de formas gramaticales, empleo de verbos, artículos o proposiciones (por ejemplo, omiten artículos, desordenan las palabras o emplean incorrectamente los tiempos verbales) y de errores fonéticos en la lectura. En general el lenguaje se hace cada vez más simplificado y menos comprensible con pérdida de la fluidez normal, pausas excesivas, frases cortas y emitidas con gran esfuerzo e incluso tartamudez. Dado que la persona es consciente de su alteración en la expresión del lenguaje, ello puede conllevarle al mutismo y retraimiento social.
Cómo se trata
El estudio de cualquier afasia debe llevarse a cabo por la especialidad de Neurología. Ante la detección de problemas en el lenguaje se realiza una historia clínica detallada. Es importante indagar la forma de inicio del cuadro y su evolución, así como la presencia de otras posibles alteraciones como pueden ser las motoras. Normalmente se realiza un estudio mediante pruebas diagnósticas de imagen y un test de valoración personal para la confirmación del diagnóstico y la identificación de la posible causa, así como la ubicación del área lesionada.
Ante un caso de afasia se recomienda un tratamiento rehabilitador integral, debiendo abordarse no sólo la recepción y expresión del lenguaje hablado, sino también sus problemas motores, distímicos o afectivos.
Lo que debes saber…
- La afasia es una lesión adquirida en una persona que previamente estaba bien.
- Es un trastorno del lenguaje a consecuencia de una lesión cerebral que puede afectar a la lectura, la escritura, la expresión o la comprensión.
- Por tanto, se recomienda un tratamiento rehabilitador integral, para abordar no sólo la recepción y expresión del lenguaje hablado, sino también sus problemas motores, distímicos o afectivos.