Resumen del contenido
Cómo hacer que te pasen cosas buenas es el nuevo libro de la conocida psiquiatra Marian Rojas Estapé y el primero que escribe en solitario. Con él, abre su corazón y nos muestra el camino para que todos podamos gestionar mejor nuestras emociones y mejorar así nuestra vida.
Este libro resume con pinceladas de sabiduría, rigor científico y altas dosis de experiencia personal, cómo podemos ponernos en disposición de que nos ocurran cosas buenas y cómo afrontar las malas de la mejor manera. La tecnología es uno de los pilares del libro. Lo desgranamos esta interesante entrevista que la doctora Rojas ha concedido a MAPFRE:
Las pantallas
¿Cómo utilizamos la pantalla?
Cuando estás aburrido, estás esperando en la parada del autobús, en el metro, en el médico, o estás en un momento de muchísimo enfado con tu pareja o con un hijo y lo que haces es coger tu teléfono, porque en ese momento te sientes aliviado, hay algo que se produce en ti y que está bioquímicamente demostrado y que además está diseñado para ser así, no es azar, esto se ha hecho para ser de esta manera.
¿Qué es la gratificación Instantánea?
Si yo tengo siempre todo lo que quiero y cuando lo quiero, eso me genera una gratificación instantánea, pero no es la felicidad estructural que buscamos, porque ésta la dan dos componentes de la vida: lo que tiene que ver con el amor (el amor de pareja, el amor a los amigos, el amor a la familia) y el trabajo bien hecho (sea ama de casa, carpintero, médico, autónomo, empresario, repartidor… no hay trabajo pequeño si se hace con dignidad).
Todo lo relacionado con los afectos, con el amor y con el trabajo requiere paciencia, ser capaz de tener perseverancia, ser capaz de esperar, de aceptar el error, etc. Si tú has acostumbrado a tu cerebro a que todo lo que buscas te sale y te genera una gratificación en el momento, cuando llegas a los dos grandes pilares de la vida, tienes una enorme frustración. Y el problema del siglo XXI es una nula tolerancia a la frustración, cuando las cosas no salen como queremos o nos irritamos o nos ponemos tristes, nos hundimos y buscamos constantemente no sufrir.
Cuando la tecnología nació, estaba al servicio de la humanidad, es decir para simplificarnos la vida, ayudarnos a comunicar mejor, ser capaces de mandar correos electrónicos, poder hacer videollamadas, que las empresas funcionaran de forma mucho más ágil, pero a día de hoy la tecnología ya no está al servicio de la humanidad, está al servicio de los gigantes tecnológicos, de ellos ganen más dinero.
La atención
Somos cada vez menos capaces de prestar atención a las cosas que valen la pena. La corteza prefrontal es la zona que se encarga de la atención, de la concentración, de la resolución de problemas y el control de los impulsos.
La felicidad no es lo que me pasa, sino cómo yo interpreto lo que me pasa y esa interpretación depende de varios factores y uno de ellos es de la capacidad que yo tengo de prestar atención a las cosas de la vida real, porque las cosas buenas de la vida, pasan en la vida real; la vida virtual va a base de gratificaciones instantáneas. La vida real me aporta felicidad.
Hoy en día conectamos mejor con una pantalla que con un ser humano, nos cuesta menos expresarnos y decir cómo nos sentimos a través de una Red Social o a través del teléfono que mirando a una persona a los ojos y diciéndole lo que pensamos. Por lo tanto, tenemos que ser conscientes de que es un instrumento maravilloso que ha entrado en nuestras vidas, pero que soy yo quien domina el dispositivo.
El cerebro funciona con un mecanismo que se llama use it or loose it, o lo usas o lo pierdes. Cualquiera de nosotros que usa Wikipedia o Google para buscar cualquier cosa de la que no se acuerda, lo que va haciendo es atrofiar su hipocampo, que es la zona del cerebro que se encarga de la retención de datos y de la memoria, es decir, ninguno tiene más memoria desde hace diez años que utiliza el teléfono o el ordenador para todo. Cuando uno va conduciendo y utiliza todo el rato un navegador, cada vez se orienta peor, porque el cerebro cuanto menos le haces trabajar, menos trabaja y menos capacidad tiene.
Nos pasamos la infancia sobre estimulando a los niños y luego en la edad adulta nos obsesionamos con ir a hacer yoga, mindfullnes, retiros, silencio, zonas sin teléfonos…, pero hemos estimulado a los niños y les hemos atrofiado su capacidad de prestar atención desde muy pequeños.
Marian Rojas Estapé valora la importancia de la tecnología y sabe que utilizada de una manera correcta aporta muchas cosas buenas, sin embargo, es importante saber gestionarla y entender que ésta está al servicio de las personas y no al revés. Utilizar nuestro cerebro, entablar relaciones con otras personas o desconectar el móvil de vez en cuando debería ser algo fundamental en nuestra vida, ¿te animas?
Primera parte: Entrevista a Marian Rojas