Resumen del contenido
Qué son las inmunoglobulinas
Los anticuerpos o inmunoglobulinas son proteínas que fabrica el sistema inmunitario para combatir las posibles infecciones de bacterias, virus y toxinas.
En concreto, la IgA se encuentra en concentraciones muy altas en las mucosas del organismo:
- Vías respiratorias,
- Tubo digestivo,
- Saliva
- Lágrimas.
En el caso de la IgA es el primer anticuerpo en hacer frente a una infección, sobre todo las virales, apareciendo los primeros días del inicio de la infección. Es lógico, por tanto, que esta inmunoglobulina esté presente en abundancia en las mucosas: las vías de entrada de nuestro organismo.
Por lo general, tanto la IgA como la IgG y la IgM, se miden simultáneamente. Al evaluarse juntas, brindan información importante sobre el funcionamiento del sistema inmunológico, especialmente en lo relacionado con las infecciones y las enfermedades autoinmunes. Niveles de IgG, IgM o IgA demasiado bajos o altos, puede ser signo de un problema de salud grave que debe ser estudiado con mayor profundidad por su médico de referencia.
Qué se puede evaluar con una determinación de las inmunoglobulinas
- Unos niveles bajos de inmunoglobulinas nos hacen más vulnerables a las infecciones pudiéndose manifestar como infecciones bacterianas o virales muy frecuentes o inusuales o diarrea crónica.
- Unos niveles de inmunoglobulina muy altos pueden ser signo de una enfermedad autoinmune o crónica, de una infección o de algún tipo de cáncer. Los síntomas de las diferentes situaciones varían enormemente por lo que la valoración siempre debe hacerla un médico con una buena historia clínica y exploración para solicitar más pruebas que confirmen uno u otro diagnóstico.
Afecciones que se pueden diagnosticar
- Infecciones bacterianas o virales: si están activas o bien si se han pasado y han generado inmunidad.
- Inmunodeficiencias: son alteraciones de la inmunidad que reducen la capacidad del organismo para combatir infecciones.
- Trastornos autoinmunes: son enfermedades donde hay una alteración en el reconocimiento de las propias células de nuestro organismo, reconociéndolas como extrañas atacando a tejidos y órganos propios. Un ejemplo sería la artritis reumatoide o la diabetes tipo 1.
- El mieloma múltiple: un tipo de cáncer de la sangre.
- Infecciones en los recién nacidos.
Test IgA
La IgA también desempeña un papel en la defensa contra infecciones, en las reacciones alérgicas y concentraciones de IgA en sangre pueden ser altas en las afecciones autoinmunes.
La prueba de la IgA puede ayudar a los médicos a diagnosticar afecciones del sistema inmunitario, los intestinos y los riñones. Es una prueba habitual que se solicita en niños con infecciones recurrentes. En pacientes adultos puede ayudar a evaluar enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide o el lupus.
Para su determinación solo es necesaria una analítica de sangre por venopunción y no requiere ninguna preparación especial ni acudir en ayunas.
Deficiencia de IgA
- Los niños que nacen con niveles bajos de IgA (o que carecen de esta proteína) tienen un mayor riesgo de desarrollar afecciones autoinmunitarias, como las infecciones, el asma y las alergias. Los resultados suelen estar disponibles en menos de una semana.
- La deficiencia selectiva de IgA es una enfermedad del sistema inmunitario que se caracteriza por una insuficiente cantidad de inmunoglobulina A (IgA). La mayoría de las personas con deficiencia selectiva de IgA no tienen infecciones recurrentes y no suelen darse cuenta de esta situación. Sin embargo, algunas personas que tienen deficiencia de IgA presentan neumonía, infecciones de oído, de los senos nasales, alergias, asma o diarrea.
Algunas enfermedades autoinmunes pueden presentar una deficiencia selectiva de IgA como la artritis reumatoide, el lupus, la enfermedad celíaca o la enfermedad intestinal inflamatoria.
Lo que debes saber…
- La IgA es el primer anticuerpo en hacer frente a una infección, sobre todo las virales, y aparece los primeros días. Es lógico, por tanto, que esta inmunoglobulina esté presente en abundancia en las mucosas, las vías de entrada de nuestro organismo.
- Por lo general, tanto la IgA como la IgG y la IgM, se miden simultáneamente. Al evaluarse juntas, brindan información importante sobre el funcionamiento del sistema inmunológico, especialmente en lo relacionado con las infecciones y las enfermedades autoinmunes.
- Unos niveles bajos de inmunoglobulinas nos hacen más vulnerables a las infecciones pudiéndose manifestar como infecciones bacterianas o virales muy frecuentes o inusuales o diarrea crónica. Y unos niveles de inmunoglobulina muy altos, pueden ser signo de una enfermedad autoinmune o crónica, de una infección o de algún tipo de cáncer.