Inmunoterapia como tratamiento contra el cáncer
Resumen del contenido
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Las células tumorales presentan una serie de características diferentes a las células sanas. En condiciones normales el sistema inmunitario debería ser capaz de reconocerlas y destruirlas. Sin embargo, las células que forman un tumor son capaces de:
- Camuflarse y evitar ser reconocidas por el organismo.
- Producir sustancias inmunodepresoras que impiden la correcta actuación de nuestro sistema inmunológico.
Se ha demostrado que el cáncer es más frecuente en aquellas personas que tienen el sistema inmunitario más débil, ya que el tumor tendrá más posibilidades de desarrollarse.
Qué es la inmunoterapia
La inmunoterapia consiste en una serie de tratamientos que utilizan el sistema inmunitario del propio paciente para tratar diferentes tipos de enfermedades.
La inmunooncología es la administración de inmunoterapia destinada a tratar específicamente la enfermedad cancerígena. Su mayor diferencia con respecto a otros tratamientos contra el cáncer, como la quimioterapia (ataca y destruye directamente las células del tumor) es que consiste en la manipulación del sistema inmunitario, estimulando la respuesta inmunológica del paciente para que sea capaz de reconocer a las células cancerígenas y destruirlas.
Éxito de la inmunoterapia
La inmunoterapia ha demostrado eficacia frente a un gran número de tumores, como es el caso del melanoma, cáncer de riñón, pulmón, hígado, estómago, vejiga, cabeza y cuello, linfomas y algunos tumores ginecológicos.
En pacientes con ciertos tipos de tumores, como es el caso del melanoma o algunos tipos específicos de cáncer de pulmón, la inmunoterapia ya se considera hoy en día el tratamiento de primera elección.
Efectos secundarios del tratamiento
Su toxicidad suele ser menor que la de los tratamientos convencionales, como la quimioterapia. Sin embargo, entre un 5-15% de los pacientes pueden presentar cuadros clínicos relevantes que suelen deberse a la activación del sistema inmunológico contra el propio organismo del paciente. Estos síntomas se deben consultar siempre con el médico que controla el tratamiento. Serían los siguientes:
- Síntomas generales: malestar general, debilidad, mareos, fiebre, escalofríos, mialgias-artralgias (dolor de músculos y articulaciones). Aumento de peso por retención de líquidos, palpitaciones del corazón, presión arterial alta o baja y síntomas parecidos a la gripe.
- Síntomas gastrointestinales (“colitis”): dolor abdominal, náuseas, diarrea, etc.
- Síntomas respiratorios (“neumonitis”): tos y dificultad para respirar. Congestión de senos nasales.
- Síntomas de toxicidad hepática: astenia (cansancio), anorexia (pérdida de apetito) o ictericia (pigmentación amarillenta de la piel), etc.
- Síntomas cutáneos: inflamación, irritación, con enrojecimiento y/o sarpullido.
- Alteraciones hormonales.
Tipos de inmunoterapia
La inmunoterapia inespecífica
Es aquélla que se encarga de estimular al sistema inmunitario en general, en su totalidad.
Citoquinas: son un conjunto de proteínas que regulan la interacción entre las células de nuestro sistema inmunitario, promoviendo su estimulación y regulando su actividad en el desarrollo de la respuesta inmunológica. Regulan también otros procesos corporales, como la inflamación.
Anticuerpos monoclonales: son anticuerpos, proteínas “de defensa” producidas por nuestro sistema inmunitario cuando detecta elementos extraños al cuerpo, llamados antígenos, dirigidos específicamente contra algún componente de la célula tumoral o de alguna sustancia que necesita ésta para su crecimiento.
Proteínas de control inmunológico: en este caso se activan de manera permanente ciertos mecanismos del sistema inmunitario para que éste pueda generar una respuesta mantenida y específica frente a un determinado tumor.
Inmunoterapia específica
Es la que actúa sobre una célula o elemento antigénico concretos, por ejemplo, las vacunas.
Vacunas: consisten en enfrentar al organismo a un antígeno (un fragmento del agente infeccioso o una célula tumoral) de forma que se reconozca y se produzca una respuesta inmunológica contra él. Las técnicas de biología molecular avanzadas disponibles en la actualidad han permitido estudiar detalladamente y seleccionar los antígenos con mayores posibilidades de desencadenar estas respuestas.
En concreto las vacunas preventivas se utilizan antes de la aparición de un tumor, para evitar que se genere en un futuro, como la vacuna del papiloma humano (cáncer de cuello de útero) o la vacuna de la hepatitis B (relacionado con cáncer hepático).
En un futuro próximo se podrá disponer de vacunas con un objetivo terapéutico, que puedan provocar la reacción inmunológica contra el tumor.
Ventajas de la inmunoterapia
Entre las principales ventajas del tratamiento con inmunoterpaia para el cáncer se encuntra:
- Memoria inmunológica: una vez estimulado el sistema inmunitario será capaz de volver a activarse en posteriores ocasiones reconociendo y luchando contra el tumor.
- La especificidad: el tratamiento sólo actúa sobre las células tumorales sin dañar a las sanas.
- El tiempo: a medida que avanzamos con el tratamiento, la respuesta inmunológica hacia el tumor va aumentando progresivamente hasta alcanzar una respuesta constante que se mantiene en el tiempo.
- Inmunoterapia de combinación: durante el desarrollo de un tumor se pueden alterar varias fases de la respuesta inmunológica. Por tanto, la utilización simultánea de dos o más tratamientos de inmunoterapia es una de las estrategias más empleadas para aumentar la eficacia antitumoral.
- Tratamiento adyuvante en algunos tumores, por ejemplo, para prevenir reapariciones del tumor en pacientes en los que se ha extirpado completamente la enfermedad mediante cirugía, pero en los que puede existir enfermedad microscópica.
Gracias a la intensa investigación, cada día se conocen más los mecanismos que utiliza el cáncer para evitar la acción del sistema inmunitario, por lo que se están desarrollando fármacos dirigidos a esos mecanismos que permiten al sistema inmunitario combatir el tumor. Es esperanzador observar que tumores que antes se consideraban incurables, en este momento permitan supervivencias muy prolongadas, incluso de años.
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Lo que debes saber…
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- Consiste en una serie de tratamientos que utilizan el sistema inmunitario del propio paciente para tratar diferentes tipos de enfermedades
- En un primer momento, el uso de la inmunoterapia se limitaba a pacientes en los que había fracasado el tratamiento convencional, habitualmente con quimioterapia.
- En la actualidad, la inmunoterapia ha demostrado eficacia frente a un gran número de tumores, sobre todo en pacientes con melanoma o algunos tipos específicos de cáncer de pulmón.
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