Qué es la nutrición ortomolecular

Resumen del contenido
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética, especializada en nutrición pediátrica y deportiva. Con más de 15 años de experiencia profesional en hospitales, clínicas y empresas de salud. Redactora de contenidos y coautora de diferentes libros de divulgación sobre alimentación.
La nutrición ortomolecular es un enfoque terapéutico que busca prevenir y tratar enfermedades mediante el suministro “óptimo” de nutrientes esenciales como vitaminas, minerales, aminoácidos y otros compuestos bioquímicos. Aunque ha ganado popularidad en ciertos sectores de la medicina alternativa, la nutrición ortomolecular también ha sido objeto de controversia y críticas severas dentro de la comunidad científica, debido a la falta de evidencia robusta que respalde muchas de sus afirmaciones.
¿En qué consiste la nutrición ortomolecular?
El término “ortomolecular” deriva del griego “orto”, que significa “correcto” u “óptimo”, y hace referencia al mantenimiento de una concentración ideal de nutrientes en el cuerpo. Los defensores de esta práctica argumentan que desequilibrios nutricionales pueden ser la causa subyacente de diversas enfermedades y que la suplementación con dosis elevadas de nutrientes específicos (mayor a la recomendada a la población general) puede corregir estas deficiencias.
La nutrición ortomolecular enfatiza el uso personalizado de suplementos en “megadosis”, ajustadas a las necesidades bioquímicas individuales, con el objetivo de optimizar funciones fisiológicas y prevenir enfermedades crónicas.
El Seguro de MAPFRE Salud cuenta con cientos de especialistas en todas las disciplinas, por lo que si tienes dudas sobre nutrición y necesitas asesoramiento de un nutricionista, no dudes en contactar.
¿Cómo funciona?
La base de la nutrición ortomolecular es que cada persona tiene requisitos únicos de nutrientes basados en su genética, estado de salud y estilo de vida. Los defensores creen que las concentraciones de nutrientes pueden ajustarse para mejorar el metabolismo celular, combatir el estrés oxidativo y reducir la inflamación crónica. Para determinar las necesidades específicas, se utilizan análisis de sangre, cabello u orina para medir los niveles de vitaminas, minerales y otros compuestos.
Algunos mecanismos propuestos incluyen:
- Regulación de la función inmune: altas dosis de vitamina C o zinc se han asociado con la mejora en la respuesta inmunológica.
- Reducción del estrés oxidativo: los antioxidantes como las vitaminas E y C ayudan a neutralizar los radicales libres.
- Optimización del metabolismo celular: nutrientes como las vitaminas del complejo B son fundamentales para las reacciones enzimáticas.
¿Qué supuestos beneficios provoca?
La nutrición ortomolecular se ha asociado con los siguientes beneficios:
- Prevención y tratamiento de enfermedades crónicas: se afirma que el enfoque puede prevenir enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y enfermedades neurodegenerativas.
- Mejora de la salud mental: la suplementación con ciertos nutrientes, como ácidos grasos omega-3, magnesio y vitaminas del complejo B, parece mostrar potencial en la reducción de síntomas de depresión y ansiedad.
- Fortalecimiento del sistema inmunológico: la vitamina D y la vitamina C son promocionadas como agentes que pueden reducir la susceptibilidad a infecciones.
¿Qué dice la ciencia?
La nutrición ortomolecular enfrenta varias críticas y es considerada una pseudociencia por muchos, desde expertos el Ministerio de Sanidad de España como numerosas instituciones y organismos internacionales, como la Asociación Americana de Oncología o la Academia Americana de Pediatría.
Las principales razones para desaconsejarla son:
- Falta de evidencia científica sólida: aunque existen estudios preliminares que sugieren beneficios de ciertos nutrientes, muchas afirmaciones de la nutrición ortomolecular no han sido confirmadas por ensayos clínicos aleatorizados y controlados, el estándar de oro en investigación médica.
- Riesgos asociados a dosis altas: el consumo excesivo de algunos nutrientes puede ser tóxico. Por ejemplo, altas dosis de:
- Vitamina B6 pueden causar acidez estomacal, náuseas, sensibilidad al sol.
- Vitamina A pueden causar hepatotoxicidad, náuseas, mareos, dolor de cabeza.
- Vitamina D pueden causar exceso de calcio, cálculos renales, debilidad muscular, mareos.
- Vitamina C pueden causar cálculos renales, hemocromatosis, diarrea.
- Vitamina E pueden causar sangrado, hipertensión arterial, diarrea.
- Hierro puede contribuir al daño oxidativo, problemas intestinales, pérdida de cabello.
- Calcio pueden causar diarrea, cálculos renales, problemas de vista.
- Enfoque reduccionista: la nutrición ortomolecular se centra en los nutrientes individuales, pero muchos expertos argumentan que una dieta equilibrada es más eficaz para la salud general que el consumo de suplementos.
- Comercialización agresiva: la industria de los suplementos ha adoptado muchos principios ortomoleculares para promocionar productos, lo que genera preocupaciones sobre intereses financieros que pueden influir en la promoción de esta práctica.
Un ejemplo relevante es el uso de “megadosis” de vitamina C para prevenir o tratar el resfriado común, estudios posteriores han mostrado que el efecto de la vitamina C en la prevención de resfriados es mínimo y no justifica el uso de dosis extremadamente altas.
Conclusión
La nutrición ortomolecular presenta una perspectiva interesante sobre el papel de los nutrientes en la salud, al enfatizar un enfoque personalizado y preventivo. Sin embargo, su falta de respaldo por parte de estudios científicos rigurosos y los riesgos potenciales asociados con el consumo excesivo de dosis, así como la visión reduccionista (el estado de salud no puede medirse solo por la cantidad de nutrientes), y la afirmación de que altas dosis de nutrientes pueden curar o prevenir enfermedades graves sigue siendo altamente controvertida.
Es fundamental que los profesionales de la salud evalúen de manera crítica la evidencia disponible y que los pacientes sean informados sobre los riesgos y beneficios antes de adoptar cualquier intervención basada en la nutrición ortomolecular. La promoción de una dieta equilibrada sigue siendo la estrategia más respaldada por la ciencia para mejorar la salud y prevenir enfermedades.
Lo que debes saber…
- La base de la nutrición ortomolecular es que cada persona tiene requisitos únicos de nutrientes basados en su genética, estado de salud y estilo de vida. Los defensores creen que las concentraciones de nutrientes pueden ajustarse para mejorar el metabolismo celular, combatir el estrés oxidativo y reducir la inflamación crónica.
- La nutrición ortomolecular enfrenta varias críticas y es considerada una pseudociencia por muchos, desde expertos el Ministerio de Sanidad de España como numerosas instituciones y organismos internacionales, como la Asociación Americana de Oncología o la Academia Americana de Pediatría.
- Es fundamental que los profesionales de la salud evalúen de manera crítica la evidencia disponible y que los pacientes sean informados sobre los riesgos y beneficios antes de adoptar cualquier intervención basada en la nutrición ortomolecular.
Referencia bibliográfica
- Basulto J, Baladia E, Manera M, Sotos M, Blanquer M, Revenga J, Gil A, San Mauro I, Amigó P. Grupo de Revisión Estudio y Posicionamiento de la Asociación Española de Dietistas‐Nutricionistas (GREP‐AEDN). “Nutrición Ortomolecular”. Postura del GREP‐AEDN. Febrero de 2012
- Bendich, A., & Langseth, L. (1995). The health effects of vitamin C supplementation: A review. Journal of the American College of Nutrition, 14(2), 124-136.
- Scientific Committee on Food and Scientific Panel on Dietetic Products, Nutrition and Allergies of the European Food Safety Authority. Tolerable Upper Intake Levels for vitamins and minerals. European Food Safety Authority; 2006.
- American Academy of Pediatrics Commitee on Nutrition. American Academy of Pediatrics Commitee on Nutrition: megavitamin therapy for childhood psychoses and learning disabilities. Pediatrics. 1976; 58(6): 910‐2.
Comentarios (0)