Testosterona en la mujer: valores y síntomas

Dra. Natalia García Montaner

N. Colegiado: 080830158 | Licenciada en Medicina y Cirugía. Especialidad en Ginecología y Obstetricia de MAPFRE | Web

Médico especializada en ginecología y obstetricia. Con más de dos décadas de experiencia en la profesión, es una experta en ecografía de 20 semanas, diagnóstico prenatal, parto, histeroscopia quirúrgica y laparoscopia, entre otras. Compagina su trabajo en diferentes centros con la docencia y la redacción de artículos.

 

Los valores normales de testosterona son unas 20 veces más altos en hombres que en mujeres, pero en ambos sexos es necesaria para distintas funciones.

¿Qué funciones realiza esta hormona?

• En el hombre durante la vida embrionaria es responsable del desarrollo de los genitales masculinos, y durante la pubertad de los caracteres sexuales secundarios: cambios en los genitales, vello facial y corporal, voz más grave, nuez en el cuello, mayor desarrollo muscular y óseo, e inicio de la función reproductiva. En el adulto es la responsable del mantenimiento de esta función: deseo sexual y estimulación de la producción de espermatozoides y formación del semen.

• En la mujer después de la pubertad el mantenimiento de niveles adecuados de testosterona es necesario para la función del ovario, el metabolismo de los huesos, así como la función cognitiva y sexual. Tiene su pico máximo de secreción hacia los 20 años y va reduciendo a lo largo de la vida de la mujer.

Así actúa en la mujer

Vamos a centrarnos en la función de la testosterona en la mujer, cuando está en el rango fisiológico:

• Al igual que en el hombre, contribuye al mantenimiento de la resistencia muscular y ósea.

• Es la responsable, desde el punto de vista hormonal del deseo sexual en la mujer.

• Aumenta el flujo sanguíneo con lo que contribuye a la salud cardiovascular.

• Contribuye a la disminución del estrés y mejora la salud cognitiva.

• Previene la diabetes tipo 2, el cáncer de mama y la osteoporosis.

• Es precursora de la producción de estrógenos, por lo que tiene su papel en la fertilidad.

¿Qué pasa si está baja?

Observaremos distintos escenarios si la testosterona está patológicamente baja o alta. La testosterona se puede ver disminuida en determinadas alteraciones hormonales (amenorrea hipotalámica, menopausia precoz, elevación de la prolactina…) o por causas médicas como problemas del hígado, las suprarrenales o la infección por VIH, y condiciones que afecten negativamente los ovarios: quimioterapia, radioterapia, cirugía sobre los mismos y tratamientos médicos hormonales y no hormonales.

Esta disminución no fisiológica de la testosterona en la mujer se manifiesta a distintos niveles:

• Disminución de la líbido, la lubricación vaginal, la sensibilidad y capacidad de orgasmo.

• Pérdida de energía, alteración cognitiva y un bajo estado de ánimo.

• Empeoramiento de la salud cardiovascular.

• Disminución de la densidad mineral ósea, es decir, una mayor incidencia de osteoporosis.

El tratamiento puede incluir un suplemento de testosterona en mujeres con deseo sexual hipoactivo después de la menopausia que ha demostrado eficacia y aceptables niveles de seguridad (presenta efectos secundarios comunes como hirsutismo y acné).

Su uso no está aprobado antes de la menopausia, y por vía transdérmica, pues la administración sistémica requiere mayores estudios de seguridad para poderse difundir.

¿Qué pasa si está alta?

La testosterona alta en la mujer puede estar causada por alteraciones endocrinas del ovario como el Síndrome de ovario poliquístico o de las suprarrenales, la aparición de tumores secretores de andrógenos o por la toma de determinados fármacos y podrá provocar alguna de las siguientes manifestaciones:

• Alteraciones en el ciclo menstrual y secundariamente problemas de fertilidad.

• Exceso de vello en zonas masculinas (bigote y barba, pecho), denominado hirsutismo, o por el contrario, caída del cabello en zonas masculinas (coronilla y entradas, llamado alopecia androgénica).

• Exceso de secreción sebácea que puede ocasionar piel grasa y acné.

• En casos graves, puede ocasionar virilización: pérdida del perfil corporal femenino, voz más grave, reducción del tamaño mamario, aumento de la masa muscular y del tamaño del clítoris.

• Aumento de la libido.

¿Cómo se trata?

El tratamiento dependerá de la causa, y consistirá en la retirada del fármaco causante si es el caso o en la extirpación del tumor si es el responsable. Para el hiperandrogenismo causado por el Síndrome de ovario poliquístico se prescriben pastillas anticonceptivas u otros fármacos en casos de patología suprarrenal.

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Lo que debes saber…

• Los valores normales de testosterona son unas 20 veces más altos en hombres que en mujeres, pero en ambos sexos es necesaria para distintas funciones.

• En la mujer después de la pubertad el mantenimiento de niveles adecuados de testosterona es necesario para la función del ovario, el metabolismo de los huesos, así como la función cognitiva y sexual.

• La testosterona alta en la mujer puede producir alteraciones en el ciclo menstrual y secundariamente problemas de fertilidad, así como exceso de vello en zonas masculinas (bigote y barba, pecho), o por el contrario, caída del cabello en zonas masculinas (coronilla y entradas, llamado alopecia androgénica).