Superalimentos y niños
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética, especializada en nutrición pediátrica y deportiva. Con más de 15 años de experiencia profesional en hospitales, clínicas y empresas de salud. Redactora de contenidos y coautora de diferentes libros de divulgación sobre alimentación.
Rotundamente no, los factores que intervienen en la salud de las personas son muchos: además de la alimentación también influye la genética, la actividad física, factores medioambientales… Es importante recordar que ningún alimento consumido de manera aislada es capaz de curar ninguna enfermedad, ni aportará salud por si solo sino que deben consumirse dentro de una dieta equilibrada junto a otros alimentos saludables.
Alimentos claves para su crecimiento
Sí que podemos decir que existen alimentos con propiedades muy interesantes que pueden ayudar a mantener una buena salud y que resultan claves para su crecimiento y desarrollo. Es el caso de:
- Aceite de oliva virgen extra: en nuestro país es la grasa saludable por excelencia. Aporta ácido oleico (ácido graso monoinsaturado) en un 75% de su composición, aunque también contiene ácido linoleico y linolénico. La distribución que posee de estos compuestos es la que más se aproxima a la óptima, según la Asociación Americana del Corazón. Además, aporta vitamina E y betacarotenos, ambos potentes antioxidantes. Entre sus beneficios destacan su efecto cardioprotector, regulador de la tensión arterial, además de preventivo de enfermedades relacionadas con la oxidación y el envejecimiento celular, tales como las enfermedades degenerativas y determinados tipos de cáncer. Las grasas participan en la formación celular, por lo que es ideal utilizar el aceite de oliva para cocinar y aliñar.
- Frutos secos: fuente de proteínas, grasas de alta calidad (tanto ácidos grasos monoinsaturados como poliinsaturados, concretamente omega 6), fibra, antioxidantes, un gran número de vitaminas del grupo B, vitamina E y minerales como el magnesio, el calcio y el fosforo, entre otros. Ideales para los niños por el aporte energético, porque ayudan a mantener el sistema músculo-esquelético, y por su alto contenido en fibra. Además, varios estudios muestran la relación entre el consumo de frutos secos y la reducción de la obesidad y la diabetes. Debe prestarse especial atención en ofrecer triturados o machacados a niños menores de tres años por el riesgo de atragantamiento. Se recomienda un puñadito diario.
- Legumbres: son una excelente fuente de proteínas, carbohidratos y fibra. Ideales para prevenir el estreñimiento, la hipertensión e incluso el sobrepeso (siempre que se cocinen evitando grasas saturades -embutidos, manteca…-). Es un alimento muy versátil que puede dar mucho juego en los platos de los más pequeños: puede formar parte de un plato principal como unas lentejas con arroz o una ensalada de lentejas, acompañar un segundo plató, por ejemplo unas alubias blancas salteadas con ajitos o servirse como tentempié en forma de humus. Se aconseja un consumo de entre 2-4 veces a la semana.
- Verduras y hortalizas: son ideales para hidratar el organismo, si son frescas y de temporada resultan todavía mejores para mantener todos sus nutrientes y beneficios para la salud. Las verduras y hortalizas destacan por aportar principalmente vitaminas, minerales y fibra. Además, proporcionan una importante cantidad de antioxidantes que las convierten en imprescindibles en cualquier dieta saludable. Ayudan a reducir el riesgo de enfermedades, entre ellas cardiovasculares, degenerativas, etc. Varios estudios muestran que el consumo de verduras y frutas es insuficiente entre los niños y adolescentes, por lo que es importante potenciar su consumo para conseguir un óptimo crecimiento. Deben estar presentes en comida y cena, para lo que conviene presentarlas de manera apetecible y atractiva aprovechando sus diversos colores.
- Frutas: al igual que las verduras y hortalizas, son alimentos indispensables para mantener un buen estado de salud. Destacan por su aporte de azúcares, fibra, sustancias fotoquímicas como la vitamina C (presente sobre todo en cítricos), vitamina E, betacarotenos, flavonoides… todos potentes antioxidantes con gran poder preventivo de enfermedades como el estreñimiento, hipertensión, obesidad, etc. Son importantes para un correcto desarrollo por lo que dar ejemplo comiendo 3 piezas de fruta al día será la mejor manera de hacer que les guste. Pueden formar parte de ensaladas, ofrecerse entre horas o como postres.
La infancia es una época en la que se instauran los hábitos alimentarios, por lo que seguir una dieta saludable junto a los más pequeños, donde estén presentes todos estos grandes alimentos, ayudará a que crezcan con buena salud y mantengan unos buenos hábitos en la edad adulta.
Recuerda que con los seguros de MAPFRE Salud tienes a tu disposición un amplio cuadro médico de especialistas en Nutrición.
Si necesitas orientación médica 24 horas o asistencia médica especializada, recuerda que el Seguro de MAPFRE Salud incluye esas coberturas y otras ventajas.
Lo que debes saber…
- Ningún alimento consumido de manera aislada es capaz de curar ninguna enfermedad, ni aportar salud por si solo, sino que debe consumirse dentro del marco de una dieta saludable.
- Los frutos secos son una gran opción por el aporte energético, por ayudar a mantener el sistema músculo-esquelético gracias al calcio y fósforo, y por su alto contenido en fibra.
- Las frutas y verduras destacan por su fibra, sustancias fotoquímicas como la vitamina C, E, betacarotenos, flavonoides… todos potentes antioxidantes con gran poder preventivo frente al estreñimiento, hipertensión, obesidad, etc.
Comentarios (0)