Las más relevantes son las mayores pues aportan la mayor parte de la saliva y sobre ellas recae la mayoría de las patologías más comunes. Las glándulas salivares mayores son la glándula parótida, la submaxilar y la sublingual.

Trastornos de la secreción de las glándulas salivares

Según la cantidad secretada podemos denominar a estas alteraciones:

  • Asialia, supresión total de la secreción de saliva. Es poco frecuente. Ocurre por la ausencia congénita de las glándulas salivares o bien por su atrofia.
  • Hiposialia, condición que se caracteriza por una secreción de saliva diaria inferior a 500ml. La saliva es más viscosa de lo normal. Esta situación provoca la llamada boca seca o xerostomía. La xerostomía favorece la caries y la sialoadenitis (inflamación de las glándulas salivares) así como procesos sépticos o infecciosos orales. Puede estar provocada por las siguientes causas:

La toma de fármacos tipo barbitúricos, ciclopléjicos, antihipertensivos o antidepresivos tricíclicos.

Procesos febriles y/o deshidratación.

  • Enfermedades degenerativas de las glándulas salivares, enfermedad de Sjögren…
  • Agenesias parciales de las glándulas salivares
  • Atrofia de las glándulas salivares tras tratamientos como radioterapia, citostáticos o Yodo radioactivo.
  • Sialorrea es el aumento patológico de la secreción salivar. Está provocado, en un gran número de ocasiones, por el estímulo irritativo de la mucosa bucal.

Procesos inflamatorios bucofaríngeos.

  • Sialoadenosis neurogénicas como neuralgias del trigémino o síndrome de Frey.
  • Lesiones del sistema nervioso central, de núcleos salivatorios, de ganglios basales, de córtex o Parkinson.
  • Alteraciones del sistema digestivo como esofagitis, gastritis, ulcus o pancreatitis.

Trastornos obstructivos

  • Ránula, tumoración blanda azulada en el suelo de la boca que se produce por traumatismo sobre la glándula sublingual con ruptura del conducto salival causando la salida y acúmulo de mucina (componente de la saliva).
  • Mucocele, traumatismo producido por la mordedura involuntaria o nerviosa del labio inferior dando lugar a un quiste de contenido salivar.
  • Sialolitiasis, formación de un cálculo en las glándulas salivares produciendo la obstrucción en el conducto de excreción. Es muy frecuente, constituyendo el 30 % del total de las patologías salivares. Afecta en un 80 % de los casos a la glándula submaxilar. Aparece una tumoración dolorosa coincidiendo con las comidas por el estímulo de la producción de saliva.

Trastornos Inflamatorios

Sialoadenitis: es la causa más frecuente de obstrucción de las glándulas salivares. Puede ser aguda o crónica:

  • Aguda: es pasajera y, en su mayoría, provocada por agentes infecciosos, entre ellos cabe destacar:
  • Bacteriana que afecta con mayor frecuencia a la glándula parótida. El germen proviene de la boca e infecta la glándula induciendo una inflamación súbita y dolorosa unilateral. Puede provocar un signo llamado trimus (dificultad para la apertura de la boca). Si no se trata la infección puede degenerar en un absceso (o colección purulenta).
  • Vírica: suelen ser bilaterales en un 75% de los casos. Son frecuentes en niños, pudiendo cursar sin fiebre en un 30% de los casos. Se manifiesta con inflamación de la glándula. Normalmente la glándula diana es la parótida (Parotiditis o, comúnmente conocida como Paperas). El virus responsable más común es el paramixovirus y otros como el coxackie y el citomegalovirus.
  • Crónica: es aquella que persiste en el tiempo por complicaciones de las sialoadenitis infecciosas agudas o por patologías autoinmunes, entre otras enfermedades.

Parotiditis crónica del adulto: inflamación recidivante por obstrucción del conducto de la glándula afecta. Cursa con saliva turbia y tumefacción dolorosa recidivante. En la infancia es secundaria a parotiditis epidémicas o ectasias (taponamiento) congénitas.

Otras

  • Sialodenitis crónica esclerosante de la glándula submaxilar: causada por sialodenosis obstructiva y una reacción inmunológica anómala asociada.
  • Síndrome de Sjögren: patología autoinmune que destruye las glándulas.
  • Síndrome de Hethford o sarcoidosis parótidea.
  • Sialodenosis provocadas por enfermedades metabólicas como la diabetes.
  • Síndrome de Frey o degeneración aberrante de fibras parasimpáticas.
  • Tumoraciones de las glándulas salivares

Son poco frecuentes representando un 0.5-1% de los tumores del cuerpo.

El 80% de los tumores son benignos. Tanto las tumoraciones benignas como las malignas anidan, en su mayoría, en la glándula parótida.

En adultos el tumor benigno más frecuente es el adenoma pleomórfico o mixto. Afecta generalmente a personas jóvenes entre 30 a 40 años.

El segundo en frecuencia es el tumor de Warthin o cistoadenolinfoma.

La tumoración maligna más frecuente en el adulto es carcinoma mucoepidermoide.

En niños, el hemangioma y el carcinoma mucoepidermoide son los tumores benigno y maligno, respectivamente, más habituales.